Cuatro buenos datos para la inflación, pero no tanto para la economía...
Un primer dato positivo es la evolución del precio del petróleo, que tras haber subido más de un 60% su precio desde inicios de año en dos momentos distintos del año, ahora no solo ha perdido lo ganado en el año, sino que cae un 1%:
El segundo dato positivo es el precio de los Contenedores desde China hasta la costa Oeste de EEUU, cuyos precios se han desplomado situándose ya en los niveles previos a la pandemia:
Un tecer dato positivo se refleja en la fuerte caída del precio de la madera (muy correlacionado con el mercado de la vivienda en EEUU), que llegó a alcanzar precios de 1700$, y se ha desplomado a precios por debajo de 400$, en niveles previos a la pandemia:
Y un cuarto dato muy positivo para la inflación es el índice de precios de vehículos de segunda mano en EEUU, que caen un 14% en el año después de haber disparado los precios en trimestres pasados (en EEUU el precio del vehículo de segunda mano llegó a superar al de primera mano trimestres atrás motivado por los problemas en la cadena de suministros y los chips).
¿Y cuál es la otra cara de la moneda? Que estos datos están implicando una desaceleración y expectativa de desaceleración fuerte de la demanda, que puede anticipar una recesión próxima.
De hecho, por ejemplo, la fuerte reversión del precio del petróleo también se dio en la segunda mitad de 2008, cuando los precios de las materias primas se desplomaron a medida que se profundizaba la recesión mundial…
Y cuando se han dado giros tan bruscos en los precios de las materias primas tras subidas verticales, se han producido recesiones económicas: