A continuación muestro tres interesantes gráficos, dos positivos para el mercado y otro negativo, sobre la evolución futura del mercado, en función de lo que ha ocurrido siempre en el pasado cuando se han llevado a cabo estos fenómenos.
El primero es un gráfico de Morgan Stanley en el que muestra cómo los cambios en la liquidez en EEUU sugeriría caídas para el índice S&P 500 desde niveles actuales, mostrando un comportamiento dispar. Y cuando esto se ha dado, el mercado ha acabado cediendo:
El segundo gráfico de Carson Investment sería la cara positiva de la moneda.
Lo que nos indica es que cuando el S&P 500 ha subido durante el Rally de Santa Claus es decir, las últimos 5 sesiones del año y las dos primeras del nuevo año) días del año en enero), cuando ha subido también durante las 5 primeras sesiones del nuevo año y además el mes de enero ha acabado en positivo (como también ha sido el caso, subiendo finalmente un 6,2%) entonces el resto del año, la bolsa (S&P 500) tiene un comportamiento muy positivo el resto del año también.
En concreto, en promedio las alzas históricamente (datos desde 1950) serían del 17,5%, y la probabilidad del éxito ha sido del 90,3%:
Cabe mencionar que ambos gráficos no son incompatibles, pudiendo indicar el primero correcciones de más corto plazo y el segundo un comportamiento alcista a más tiempo vista (retornos del año entero del 2023).
Pero aún se puede apurar más.
Un retorno elevado en enero, superior al 5% (como ha sido el caso en 2023), después de un año anerior con retornos negativos (como fue el caso del 2022), ha implicado en un 100% de los casos estudiados (al menos desde 1954) retornos positivos en el año completo en cuestión (2023 en este caso), con retornos muy superiores a los realizados en enero.
En concreto, el retorno promedio fue del 29,7%…
¿Será el 2023 un nuevo caso, o se romperá la estadística histórica?